Ing. Hernán Bernal. Coordinador de Admisiones y Registro Unisabaneta

Los tres empleos que nunca podrían desaparecer en Colombia, según la IA Aunque la automatización y la inteligencia artificial están transformando rápidamente el mercado laboral, hay ciertos empleos que tienen una alta probabilidad de mantenerse relevantes en Colombia (y en otros países) debido a factores culturales, sociales y económicos.

Aquí están tres ejemplos de profesiones que probablemente nunca desaparecerán:

1. Docentes y educadores

Razón: La educación es un pilar fundamental para cualquier sociedad, y aunque las herramientas digitales pueden complementar la enseñanza, la interacción humana es crucial para la formación integral de los estudiantes. Los maestros no solo imparten conocimientos, sino que también guían el desarrollo social, emocional y ético de los jóvenes. Contexto colombiano: En un país con grandes desigualdades en acceso a tecnología, el rol del maestro, especialmente en zonas rurales y alejadas, es insustituible.

2. Profesionales de la salud (médicos, enfermeros, y psicólogos)

Razón: Aunque las máquinas y la IA están avanzando en el diagnóstico y tratamiento médico, el cuidado humano y la empatía son esenciales en la relación médico-paciente. Profesionales como los médicos y enfermeros ofrecen un contacto personal que no puede ser reemplazado. Contexto colombiano: En regiones apartadas con acceso limitado a la tecnología, los profesionales de la salud son esenciales. Además, los retos de salud mental en el país refuerzan la necesidad de psicólogos y trabajadores sociales.

3. Agricultores y trabajadores rurales

Razón: La producción de alimentos es un sector vital y en Colombia tiene raíces profundas en la economía y cultura. Aunque se pueden implementar tecnologías agrícolas, el conocimiento práctico y local de los trabajadores rurales sigue siendo fundamental.

Contexto colombiano: Con un clima diverso y regiones agrícolas clave como el Eje Cafetero, los agricultores desempeñan un rol esencial en la seguridad alimentaria y la exportación de productos como café, flores y frutas.

Mientras que la tecnología puede cambiar cómo se realizan estos trabajos, la interacción humana, el conocimiento cultural y las necesidades básicas garantizan que estas profesiones sean resistentes a la automatización total.